LAS FUNCIONES DEL CHAMAN
Por importante que sea el rol de los chamanes en la vida religiosa del Asia Central y septentrional permanece limitado.
El chaman no es sacrificador: no entra en sus atribuciones de vigilar los sacrificios que se ofrecían, en días determinados, a los dioses del agua, del bosque y de la familia.
En el Altai el chaman no tiene nada que ver en las ceremonias del nacimiento, matrimonio y enterramiento, excepto sucediere algo insólito. Por ejemplo, que se llamara al chaman en el caso de esterilidad o de parto difícil.
Más al norte, el chaman frecuentemente es invitado a los enterramientos, para impedir el regreso del alma del muerto. También está presente en los matrimonios para proteger a los recién casados de los malos espíritus. Pero su rol se limita al de una defensa mágica.
Por el contrario, el chaman es irremplazable en toda ceremonia vinculada con las experiencias del alma como tal, como unidad psíquica precaria, proclive a abandonar el cuerpo y presa fácil de los dominios y brujos.
Es por eso que en toda el Asia Central y en la América del Norte, y en otros lugares también (Indonesia, por ejemplo), el chaman cumple la función de médico y sanador. Él pronuncia el diagnóstico, busca el alma fugitiva del enfermo, la captura y la reintegra al cuerpo que había dejado. Es siempre él quien conduce el alma del muerto a los Infiernos, dado que por excelencia es psicopompo(*).
Sanador y psicopompo, el chaman es tal porque conoce las técnicas del éxtasis: es decir, porque su alma puede abandonar impunemente su cuerpo y vagar a través de largas distancias, puede penetrar en los Infiernos y subir al Cielo.
Igualmente, esta facultad extática que sirve al chamán para acompañar el alma del caballo ofrecido a Dios en los sacrificios periódicos de los altaicos. En ese caso, es el mismo chamán quien sacrifica al caballo, pero lo hace porque está llamado a conducir el alma del animal en su viaje celeste hasta el trono de Bai Ulgän y no porque su función fuera la de un sacerdote sacrificador.
Por el contrario, parece que entre los Tártaros de Altai el chamán ha reemplazado al sacerdote sacrificador.
Mircea Eliade: EL CHAMANISMO
-----------
(*) El psicopompo es el rol que desempeña el chamán como guía de almas, especialmente de los difuntos, ayudándolos en su transición al más allá. Los psicopompos son entidades que escoltan a las almas después de la muerte a través de rituales y viajes espirituales. La voz proviene del griego psychopompós, compuesto de psyche, 'alma', y pompós, 'el que guía o conduce'.
Comentarios
Publicar un comentario